VIÑA TIENE FESTIVAL

No basta con tener buen fútbol, si fuera por eso Holanda habría sido campeón del mundo el 74, tampoco es suficiente tener historia, o pregúntele a los brazucas por el año 1950..(sabe a tereré). Hay equipos que durante la “historia” han tenido peso internacional, equipos coperos y sacadores de resultados pero también hay cuadros que durante 1 o 2 temporadas tienen un plantel con “mística” tienen algo que los hace ser distintos.

aquí texto que se esconde

0-3 abajo fin del partido y aplausos para el local bajan desde la galerías Cerro y Laguna; Everton había perdido dejándolo todo en cancha y parecía que los aplausos eran una mezcla entre agradecimiento por el esfuerzo dejado en cancha y un “nos vemos en el clausura”.Sin el liebre Riveros, Fido Uribe desgarrado y un 0-3 abajo era imposible ganarle a los verdes de la Florida.

Gol de Oviedo en el último suspiro de partido y el 4-1 le daba el paso a Everton a las semis, supo darlo vuelta; vino la Universidad de Chile 3-1 la ida en Santiago pero aun asi se esperaba la final soñada entre azules y blancos, “la U iba a pasar por arriba en Viña”; la frase en la previa era “SI EVERTON PUDO DARLO VUELTA CON AUDAX NOSOTROS TAMBIEN” ,empate a 1 tanto en el ex estadio El Tranque no había final soñada y el oro y cielo a la final. Últimos 5 de la ida en el Monumental, los de calle Viana 161 aguantaban con todo el empate en la ida cuando dos genialidades le daban el 2-0 tranquilizador al ; en ese entonces, Tetracampeón chileno que se probaba la corona una vez mas, imposible en Viña se venia el Penta y parecía que en tan solo 5 minutos se apagaban las voces que decían que Astengo debía irse, que no jugaban a nada y que planteaba un esquema ratonil.

Hazaña en Sausalito, Miralles Firefox metía la cola dos veces mientras Acosta sacaba una liebre de su sombrero para vacunar el sueño albo y darle después de 32 años al everforever un campeonato nacional, 3-0 rotundo, contundente, que esta vez no hizo callar las criticas al estratega albo sino, al 70% de un estadio que vía como se le iba el campeonato...el resto del Sausalito era emoción, llanto y fiesta. Parece que los únicos que daban vuelta resultados de verdad imposibles eran los de Viña del Mar, parecía que tan solo dormían y que cuando se les daba por muertos afloraba el amor propio de estos jugadores que no sólo sabían jugar al fútbol sino que también tenían mística...bueno ya no sólo eso, ahora también tienen historia.

EVERFOREEEEEEE

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